Christina Rosenvinge. La Joven Dolores. La Noche Del Incendio. Zeneszám
aparte del incendio algo nos mantenia alli
tal vez era el silencio entonces roto por las mil
sirenas, antirrobos, alarmas, que al sonar
formaban el acorde que define a esta ciudad
era como un festival inesperado en la noche estival
el papel incandescente caia como lluvia sideral
una carta ardiendo aun me cayo
muy cerca entonces tu
tu, precisamente tu
la apagaste de repente
me dijiste algo insolente
y volviste a desaparecer
me condenan por asalto, me condenan por robar
la condena es un anhelo que no puedo precisar
me atrapa, me consume, me nubla la razon
a mi, que saque notable en arte y manipulacion
esa noche el resplandor borro la luz del dia y su terror
los muchachos se embravaban,
las chicas parecian estar en flor
oi la musica sonar y acepte la unica invitacion
tu, precisamente tu
con tus modos indolentes
me escribiste tu nombre en la frente
y volviste a desaparecer
los rascacielos arden, todo deberia arder
te gusta echar de menos pero no sabes querer
te empenas en atarme y luego echas a correr
si el monstruo te da miedo ?por que le das de comer?
el diablo se lamenta y dice ?pero cual es mi funcion?
?el de arriba es ya tan torpe
que no hay manera de hacerlo peor!
mientras pincha un lexatin
con la punta de su tenedor
tu, precisamente tu
en tu caos, tan diligente
la maldad suele ser inconsciente
y vestirse de fatalidad
tu, precisamente tu
con tu amor intermitente
del pasado saltas al presente
y de nuevo, a desaparecer
(Gracias a NuRyLiS por esta letra)
Christina Rosenvinge
Christina Rosenvinge